Protocolo
La instalación comenta acerca de la ausencia de diálogo y comunicación entre países y políticos. Las formas de varios micrófonos conforman el diseño de dos sillas y una mesa como muebles simbólicos. Este tipo de micrófono es asociado en muchos países con el discurso de los políticos. Particularmente el diseño de la silla evoca la posición humana en los niveles políticos. Los micrófonos en el espaldar de la silla implican simbólicamente que cualquiera que se siente en estas para conversar, estará diciendo siempre las cosas que otra persona detrás pronuncia. El espectador puede entrar en la galería, pero la decisión de tomar asiento en la obra es metafóricamente como la decisión de entrar en una posición política.